Matteo se forma en la escuela ALMA, situada en Parma. Su trayectoria incluye a maestros como Gualterio Marchesi, y experiencias profesionales tan interesantes como un proyecto de agroturismo en Toscana, y la cocina de la Embajada Italiana en Madrid.
Su historia está estrechamente vinculada a Italia y a sus referentes culturales más puros. Criado en una familia con un marcado carácter italiano,
que le ha transmitido el amor por la tierra y sus productos, la tradición y la historia de su país,
la riqueza y los matices de cada una de sus regiones, Matteo intenta revivir su infancia y sus paisajes emocionales en los bocados de su cocina.
MATTEO
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El alma de Matteo Cucina es su propietario y cocinero principal, Matteo de Filippo.
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Su propuesta en El Mercado de la Paz aúna el concepto de tienda, con los productos italianos más selectos y cotidianos, con el de platos recién elaborados por los maestros para llevar a casa, y una pequeña zona de restaurante, para degustar el menú.
Chiara Guberti y Matteo de Filippo con el embajador de italia en madrid, leonardo visconti di modrone
En 2012 Matteo decide abrir su propio negocio en Madrid, y materializar su sueño, dignificar al máximo la cocina italiana fuera de su país.
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Su propuesta busca elevar la cocina italiana al lugar que le corresponde, alejándose del concepto limitante de comida rápida, tan abundante fuera de Italia, y explorar un concepto de gastronomía italiana más amplio, completo y honesto.
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Sus recetas son fieles a la tradición italiana, respetando el bagaje cultural recibido desde niño cuando acompañaba a comer a su padre después de ver numerosas obras de teatro.
Esta idea se materializa primero en la apertura de un pequeño puesto en el Mercado de la Paz, y 2 años más tarde la aventura crece y se completa con una pequeña cocina, la propuesta de la comida para llevar, y por último, una pequeña zona de restaurante.
Todo en “pequeño”, pero enorme en sabor y autenticidad. Matteo cocina cada día en su restaurante de la misma manera que lo hace en su propia casa.
Pero Matteo Cucina no acaba en Matteo.
Es necesario un equipo de apasionados italianos, que son ya como una familia, y que comparten la esencia de la gastronomía de su país, del sabor de sus productos, los aromas de su niñez, y la entrega por el trabajo de calidad, para que el sueño de Matteo se convierta en realidad cada día.